Botanik llega a mi con una ilusión diferente, estudiar italiano. En una ocasión fui a averiguar mis clases en el Istituto de Cultura Italiana, llegué en la hora en que nadie podía atenderte - el almuerzo -, así que decidí esperar y el echar un vistazo por la acera, ahí estaba Botanik. Sin duda alguna fue obvio fijarse en este espacio, es completamente colorido por sus sin fin de materas y lleno de flores; Nunca antes había sentido el placer de esperar solo por quedarme un buen rato en este lugar.
Al entrar me encuentro con un alguien que no sabía con claridad que procedencia tenía; Con sus amigos hablaba en Francés, en el teléfono respondía en Italiano, a otra persona le contestaba en inglés y al verme me saludó en español, él es Emerson.
Aún no tengo clara su historia - pero la dejaré para otro post -, solo sé que es el creador de la linda Botanik, y después de vivir en muchos lugares del mundo, ahora vive en Colombia y vino a regalarnos este espacio para relajar la mente, compartir con quien queramos, leer un buen libro, escuchar una buena canción y de paso, comprar unas lindas plantas.
Luego de alguno encuentros cortos en donde me senté a repasar algo de italiano y tomarme un delicioso té antes de entrar a mi clase, le conté de mi proyecto Cactil Cactus Land y me invitó a traer algunos de las piezas en vidrio soplado que trabajo, mis ¨Animal Plants¨.
Podría contar otros detalles más, pero esto no es más que una invitación para que no pierdan la oportunidad de conocer un sitio único en Bogotá, además de conocer a Emerson y su gran afecto hacia todo el que visita Botanik.
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